La Salsa Sriracha debe su nombre al distrito tailandés de Si Racha. Allí, una mujer llamada Thanom Chakkapak invento una salsa picante cuyo nombre era Sriraja Panich. Sin embargo, fue David Tran quien, tras modificar su receta y hacerla mucho más picante, la acabó lanzando a la fama. Durante la Guerra de Vietnam, Tran ya recorría con su bicicleta las calles para venderla. Finalizada la guerra, Tran se vió obligado a migrar de Vietnam a los Ángeles, Estados Unidos, en un carguero llamado Hoy Fong. Para subsistir decidió empezar a comercializar también allí su receta de salsa picante. Al principio sólo se centró en la comunidad asiática de Los Ángeles, pero finalmente su fama se extendió y acabó siendo muy apreciada por todo el país. Tran creó una empresa llamada Huy Fong Foods para su comercialización, y se ha basado siempre en el boca boca (jamás invirtió en publicidad). Manteniéndose siempre fiel a sus principios y a su receta tradicional, que requería tres meses de maduración para los chiles, tuvo que dejar de producir durante 3 meses para poder garantizar el stock. Lejos de venirse abajo, su clientela se mantuvo a la espera y a día de hoy producen 3.000 botellas a la hora.Esta salsa lleva en su composición original tan sólo 5 ingredientes: vinagre, sal, azúcar, ajo y chiles picantes madurados al sol durante 3 meses. Es un estupendo condimento para carnes, verduras y pastas. Además, en la cocina vietnamita se utiliza mezclada con la Salsa Hoisin para elaborar el tradicional phở, una sopa de noodles típica de allí. La Salsa Sriracha es una salsa muy picante, apta sólo para los grandes amantes del picante.
Para comenzar con la receta de Salsa Sriracha, lo primero es limpiar nuestros chiles. Para eso, los abriremos por la mitad y los pondremos en un tarro con el ajo pelado y el vinagre. Dejaremos que reposen durante toda una noche para que absorban bien los matices y sabores tras la fermentación.
Al día siguiente, pasamos la mezcla por la batidora junto al azúcar de coco y trituramos hasta obtener una papilla homogénea. Cuando lo tengamos listo, lo echamos en un cazo y lo ponemos a hervir durante 10 minutos a fuego lento. Retiramos del fuego y dejamos que se enfríe a temperatura ambiente.
Por último, probamos la salsa para rectificar de sal o azúcar si fuera necesario.
Notas
Si te resulta demasiado picante, puedes añadirle un poco de tomate frito o mayonesa para diluirla.
Puedes sustituir el azúcar de coco por azúcar moreno.
Quítale las pepitas y las venas centrales a tus chiles para que no quede tan picante.